Blogia
Vuelvo enseguida

Un hurra por los conceptos vacíos de sentido

Un hurra por los conceptos vacíos de sentido

«La felicidad: embustera, mentirosa, terca y sin bondad. Murmura frases aburridas que, al fin y al cabo, siempre hablan mal de mí»

Creo que ha llegado el momento de desmitificar la felicidad como tal. Durante toda nuestra vida, las personas nos empeñamos en el afán de ir en busca de ella como si fuera una meta en sí, como si se tratase de una piedra filosofal capaz de convertir en oro tu existencia. He llegado a la conclusión de que ésta es una meta que no existe, y que, en caso de existir, tampoco desearía para mí. La felicidad es la ausencia de preocupaciones, y la ausencia de preocupaciones la da la incapacidad de hacerse preguntas y cuestionarse las cosas, o bien el desinterés por todo lo circundante, en una especie de inercia bovina que es sólo ignorancia y falso bienestar.

Creo sinceramente que es necesaria una cierta infelicidad que actúe de motor y ponga en marcha los engranajes. Llegar a la felicidad comporta que la búsqueda de la misma se ha terminado, y opino que es mucho más interesante continuar planteando nuevas dificultades, nuevos retos que ayudan a la autocomprensión y a la autosuperación.

Debemos aprender a vivir con un grado de insatisfacción en nuestra vida, y aprender a llevarlo con dignidad. A ser conscientes de que existe, y de que debemos luchar por cambiarlo. He aprendido que no debo tener miedo a los malos momentos, porque sirven para darte cuenta de que, una vez que has tocado fondo, sólo te queda tomar impulso y salir nadando a la superficie. Creo que no hay que temer los ratos de vacío existencial o emocional. El vacío no es un miedo neurótico, sino la liberación de la propia neurosis. Hay que aprender a vivir con él y a aceptarlo como parte de uno mismo, o ese vacío acabará por destruir todo lo que eres.

Y nada más. Después de cargarme el mito de la felicidad y de hablar como cualquier libro de autoayuda barata, creo que ya he hecho bastante por hoy y que es hora de ir a la cama.

0 comentarios